Sonia Arcos

Mi nombre es Sonia Arcos y soy Coach Personal, certificada por Iesec-Human, Maestra de Reiki por la Alianza Española de Reiki, Economista y Especialista en Liberación Emocional.

Realizo de forma periódica Talleres y Sesiones Individuales de Ho'oponopono en Barcelona y Madrid. 

Mi camino en el mundo de las terapias, comienza hace diez años después de tener una experiencia cercana a la muerte que me llevó a hacerme las preguntas que todos nos hacemos alguna vez sobre quién soy, a qué he venido, porque he tenido esta experiencia y qué significa. Con las preguntas llegaron las herramientas para encontrar las respuestas. Primero el Reiki, después las Técnicas de Liberación Emocional y Ho'oponopono, y por último, el Coaching que me ha permitido cohesionar todo lo que aprendido.

En el año 2005 monté un Centro de terapias en Barcelona. Empecé a conocer y utilizar en mi misma técnicas de liberación emocional, como el Método Sedona, que me ayudó a liberarme de muchísimas autolimitaciones que me había impuesto, y otras técnicas que llegaron después como EFT, rompiendo lazos, metamedicina, afirmaciones positivas o cambio de creencias limitantes. En el 2010 residí en Madrid donde coordiné un Voluntariado de Reiki en hospitales, y viajé a México y Ecuador a impartir cursos de Reiki a través de una obra social. Ese año también me especialicé en Coaching empezando a impartir talleres y sesiones individuales por toda la geografía española.

En el año 2012 empecé a impartir también talleres de Ho'oponopono, técnica que ya había conocido en España y sobre la que pude profundizar en mis viajes a México y Ecuador, donde se me mostró, de la mano de un grupo de misioneras mexicanas que lo usaban en pueblos y ciudades con problemas graves. Vi su efectividad en grandes grupos de gente que se reunían para limpiar y borrar memorias para mejorar su situación social, económica y de trabajo. Es por ello que actualmente me he especializado en esta técnica y realizo Tallleres de Ho'oponopono de aportación voluntaria, para que nos reunamos el mayor número posible de personas y podamos borrar las memorias y creencias que nos limitan. Todo está en nosotros y la única manera de que veamos paz fuera de nosotros es sentirla dentro.